EL PEQUEÑO MUSEO MÁS BELLO DEL MUNDO
Des del pasado 26 de abril, la Fundación Juan March de Madrid presenta la muestra: “El pequeño museo más bello del mundo”, una exposición que explora un capítulo fascinante y único de la historia cultural de nuestro país: la creación de Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, fundado por Fernando Zobel a mediados de los años 60 del siglo XX.
Pintor filipino español, empresario, coleccionista de arte (1924-1984) Zóbel fue un mentor y coleccionista que ayudó en las carreras de los pintores modernistas españoles, incluidos Antonio Lorenzo, Eusebio Sempere, Martín Chirino López, Antonio Saura y muchos otros.
A partir de la creación en 1966 del museo en las Casas Colgadas del siglo XV en Cuenca se abre un capítulo fascinante y único de la historia cultural de nuestro país. La fe pionera de Fernando Zóbel en los artistas abstractos se materializó en un espacio insólito que pronto tuvo un enorme eco internacional y suscitó elogios como el de Alfred H. Barr, primer director del MoMA de Nueva York, que da título a esta exposición.
En la elección del recinto es determinante la amistad de Zóbel con el pintor Gustavo Torner, natural de Cuenca, así como la colaboración del Ayuntamiento de dicha ciudad en el proyecto.
El joven museo, creó un espacio de libertad independiente del régimen político, reafirmó a toda una generación de pintores y escultores, preparó a las más jóvenes y produjo todo un público nuevo en un país que no contaría con museos de arte contemporáneo hasta después de su transición democrática, más de veinte años después de aquella aventura única y original.
Inicialmente se exponían una docena de esculturas y un centenar de cuadros que Fernando Zóbel había ido reuniendo con anterioridad, si bien no se exponían sino algo menos de la mitad, con la intención de aplicar siempre una lenta rotación de los fondos. La selección de las obras no fue realizada al azar, sino buscando la calidad y no la cantidad y sin pretender formar una representación exhaustiva de artistas abstractos españoles.
«La selección se ha realizado muchas veces —declaraba su creador— con el consejo y la ayuda del autor; y para evitar el peso de falsos compromisos, el Museo se ha opuesto siempre a recibir regalo de obras».
En 2022, la Fundación Juan March -titular del museo desde 1981 por expreso deseo de Zóbel- procedió a climatizar completamente el edificio. Aprovechando el cierre parcial del museo, concibió con cinco instituciones una exposición itinerante internacional de parte de su colección, que, tras su paso por Granada, Barcelona, Dallas (Texas, EE.UU.) y Coblenza (Alemania) se presenta ahora, a su vuelta, en Madrid.
El Museo de Arte Abstracto Español - Fundación Juan March tiene la peculiaridad de ser uno de los pocos museos del mundo montado y concebido por artistas. El grueso de la colección está constituida por obra de la generación de abstractos españoles de los años cincuenta y sesenta: Canogar, Chillida, Equipo 57, Feito, José Guerrero, Lucio Muñoz, Sempere, Tàpies, Torner y Oteiza. En los últimos años, se ha enriquecido con piezas de creadores más jóvenes: Campano, Broto, Soledad Sevilla o Alfonso Albacete. También han pasado a integrar la colección algunas piezas cedidas por la Fundación Juan March. Además de acoger exposiciones organizadas por la mencionada fundación, el museo posee una editorial que publica obra gráfica, así como libros y catálogo.
La exposición permanecerá abierta hasta el 30 de junio. Entrada libre y gratuita
FUNDACIÓN JUAN MARCH
Calle de Castelló, 77, Salamanca,
Madrid
