Exposición online: UBAY MURILLO – ESPEJOS TRUCADOS
El trabajo reciente de Ubay Murillo plantea una revisión de algunos de los movimientos artísticos más emblemáticos de comienzos del siglo pasado. Su obra rezuma cubismo, futurismo y expresionismo en composiciones que no pierden su componente contemporánea y su voluntad de jugar al equívoco con el espectador.
La elección de esta estética obedece muy bien a la lectura que el artista quiere generar en sus obras. Bajo una apariencia confusa y fragmentada, subyace una temática recurrente que obliga a repensar su pintura cada vez que la observamos. Como si fuésemos un voyeur, nos enfrentamos a escenas distorsionadas, ya por los cortes sesgados de un collage basado en fotografías, ya por la pauta de repetición que se intuye en piezas que parecen reproducir las alteraciones ópticas de los espejos trucados…
El panorama nos lleva a querer entender lo que vemos, porque incluso, cuando el elemento es fácilmente reconocible, su verdad nos rehúye oculta tras un rostro sin facciones, una silueta que se asemeja a una figura humana o los pedazos rotos de un cuerpo reflejado en cristal.
Con ese salto consciente de la composición fotográfica en collage a la pintura al óleo, Ubay presenta un conjunto creativo en el que abunda el surrealismo visual (no necesariamente conceptual) y los retazos de una imagen fracturada en los que se intuye la soledad del individuo. Como heridas al descubierto, los pedazos y secciones son una pequeña parte de un todo indescifrable que, bien por remitirnos a un objeto reconocible, como un jarrón o un espejo, bien por esconder bajo ellos la otra parte del puzle que completaría la escena, siembran el desconcierto y la perplejidad en el espectador. ¿Somos acaso todos nosotros juguetes rotos, seres confinados a una soledad impuesta por las pautas de la nueva sociedad? Allá en el fondo, tras el recorte censor, se atisba el gesto, la actitud sobreentendida sin que sea necesario hallar un rostro para comprender el mensaje entretejido en la obra.
Este conjunto pictórico es un guiño del autor que nos conduce a pensar sobre el capitalismo y la sociedad de consumo.
Su obra desmembra, amputa y deconstruye el cuerpo humano, víctima inconsciente de la imposición social, de las pautas heredadas, de un tiempo quebrado internamente en una profunda crisis de humanidad. La ostentación, el lujo insinuado, las superficies satinadas, el brillo de la porcelana, las siluetas distorsionadas y las facciones escondidas conforman un puzle compositivo que cuestiona nuestra posición como individuos en un contexto adverso y cosificado.